1. Conocimiento de la Marca
En esta etapa, el objetivo principal es aumentar la visibilidad de la marca. Es fundamental que los consumidores se familiaricen con la existencia de la marca y comprendan sus valores y su propuesta de valor única. A través de campañas de publicidad en medios digitales y tradicionales, buscamos generar una presencia sólida que capte la atención de los consumidores.
El conocimiento de la marca no solo se trata de ser visto, sino de ser recordado. Por eso, nuestras estrategias de marketing se centran en crear mensajes memorables y visualmente atractivos que resuenen con el público objetivo.
2. Percepción de la Marca y Conocimiento del Consumidor
Una vez que los consumidores conocen la marca, la siguiente etapa es moldear su percepción y profundizar en su conocimiento sobre la empresa. Aquí, el objetivo es construir una conexión emocional con el consumidor, destacando los diferenciadores de la marca y cómo estos se alinean con sus necesidades y deseos.
Utilizamos contenido educativo, testimonios de clientes, y demostraciones de productos para fortalecer la percepción positiva de la marca y establecerla como una opción viable en la mente del consumidor.
3. Familiaridad e Interés en la Marca
En esta etapa, el consumidor comienza a mostrar un interés genuino en la marca. Aquí, nuestra estrategia se centra en proporcionar información detallada y relevante que responda a las preguntas y preocupaciones del consumidor. Es el momento de destacar las características únicas del producto o servicio y cómo estos pueden mejorar la vida del consumidor.
La familiaridad se construye a través de interacciones constantes y valiosas, ya sea mediante correos electrónicos informativos, contenido en redes sociales, o experiencias personalizadas en el sitio web.
4. Selección de la Marca
A medida que el consumidor se familiariza con la marca, llega el momento de influir en su decisión de compra. En esta etapa, el objetivo es posicionar la marca como la mejor opción entre las alternativas disponibles. Aquí, las tácticas como comparaciones de productos, reseñas de clientes, y pruebas gratuitas pueden ser cruciales para inclinar la balanza a favor de la marca.
Nuestra estrategia incluye la creación de contenido convincente que demuestre claramente por qué la marca es la opción más adecuada para el consumidor, atendiendo tanto a razones emocionales como racionales.
5. Intención de Compra
Cuando el consumidor muestra una intención clara de comprar, es vital que la marca facilite el proceso lo máximo posible. En esta etapa, las estrategias de remarketing y ofertas personalizadas pueden jugar un papel crucial. El objetivo es reducir cualquier fricción que pueda existir en el proceso de compra y asegurarse de que el consumidor se sienta seguro y confiado en su decisión.
Diseñamos campañas específicas para captar a estos consumidores en el momento crítico, utilizando tácticas como descuentos limitados en el tiempo o incentivos adicionales para cerrar la venta.
6. Evaluación de la Oferta de la Marca
Después de la compra, es esencial que el consumidor sienta que tomó la decisión correcta. La evaluación de la oferta es una etapa crucial donde se refuerza la satisfacción del cliente y se comienza a construir la lealtad.
Aquí, el servicio postventa y la atención al cliente juegan un papel fundamental.